Cada vez más grande – Revista “Generación X”, 1993

Contra la línea de comunicación subterránea que presagiaba un cercano final para el grupo de América, en días en los que mucho se hablaba de crisis, .transformación y cambios de ruta hacia nuevos horizontes geográficos y artísticos, Soda Stereo volvió a desencadenar un nuevo temblor. Diez años después del comienzo, el trío cambio su afiliación discográfica en favor de la empresa multinacional B.M.G y por un contrato que supera el millón de dólares.

A un millón de años luz de la separación -pese a algunos rumores, muchos y para creerlos que se animaban a anunciarla-; a un millón de años luz de permanecer inmutables en el tiempo, sin cambar, sin modificar sus postulados artísticos y exigencias profesionales que desde 1982 los hacen ir a más aun cuando el horizonte de pronto no aparezca tan claro ni transparente. A un millón de años luz de la ultima canción; a pocos días -muy cerca- de concretar lo que ya empezó a activarse como el gran pase del año, el contrato que marca un nuevo hito en la historia de Soda Stereo y otro record, este económico, para seguir amando y odiando a los tres protagonistas de la contratación discográfica mas cara en la historia de la música rock argentina.

“Noviembre de 1991: El contrato que une desde 1984 a Gustavo Cerati, Zeta Bosio y Charly Alberti con la compañía discográfica Sony Music Entertainment está sólo a un disco y medio de expirar, y el sello internacional .EMI Odeon intenta establecer un dialogo con el trío con vistas a contratarlos una vez concluido su ciclo con la compañía que los albergó desde sus primeros días. Quedan entonces un álbum de larga duración y la edición de un siguiente maxi para que Soda Stereo obtenga el "pase libre".

“Marzo de 1992: Soda Stereo se encuentra en el mismísimo lugar de su nueva obsesión: la impenetrable España. El grupo lleva a cabo su primera incursión promocional por el país mediterráneo cuando su futuro discográfico incorpora un nuevo y significativo nombre a la lista de interesados: B.M.G.

Mientras la banda aparece como invitada en programas de la televisión española, una reunión entre el manager de la banda, Daniel Kon, y el titular de la regional latinoamericana de la empresa multinacional, Ramón Segura, empiezan a llevar a buen puerto las conversaciones entre Soda y su futura compañía. EMI abandona el ring y comienza la pulseada entre Sony y B.M.G.

“Enero de 1993: Aún quedan algunas diferencias que arreglar, pero las discusiones entre ambas partes se llevan a cabo de manera inmejorable y nada parece interrumpir el camino hacia la comunión final. Si bien aun no se manejan cifras oficiales sobre el monto total del acuerdo, se sabe a viva voz que el contrato de Soda Stereo ha sido el más caro en la historia del rock argentino. Según trascendidos, el trío cobraría un millón de dólares en concepto de anticipo por futuras regalías y, en total, la incorporación de Soda a su catalogo de artistas le costaría a la compañía algo más de 1.500.000 dólares.

“Febrero de 1993: Las especulaciones sobre la transferencia, las cifras y demás entretelones del pase aun no llegan a la opinión masiva solo “por discreción". Cuando Generación X pretende incluir el nombre de la nueva compañía editora y distribuidora de la banda en su informe especial "Soda Stereo concluye o cambia su carrera”, directivos de B.M.G. recomiendan no hacerlo “por el bien del grupo" que recién empezaba el tercer periodo de gira latinoamericana -por México y Venezuela- apoyado por la campaña promocional a cargo del anterior sello del trío.

“Marzo de 1993: Se confirma el acuerdo entre Soda Stereo y B.M.G. "Al margen de las cuestiones económicas, había muchas cláusulas a las que nuestra compañía no podía responder", se escucha desde Sony. "Básicamente, la posibilidad de una penetración grande en el mercado europeo”. De hecho, el plan de desarrollo del trío en el mercado español, específicamente presentado por la compañía "beneficiada", fue el que mejor colmó las exigencias de la banda y lo que determino la ultima decisión de Soda en favor de B.M.G.