soda por siempre stereo - Revista "Musicos" "Los Secretos de Dynamo", diciembre 1992

La banda número uno de la escena nacional vuelve al ruedo con un material fresco y renovado. La trastienda de la grabación en su propio estudio, los instrumentos y efectos utilizados y el concepto del álbum son algunos de los temas de esta entrevista.

MUSICOS: ¿Como fue la gestación de “Dynamo”?

G. Cerati: La primera incursión tuvo lugar en abril, durante los ensayos para la gira por España. No nos habíamos reunido desde enero, cuando hicimos los shows en Mar del Plata, y realmente no teníamos casi nada de material como para grabar un disco. Yo había esbozado dos o tres temas (Primavera 0, Remolinos y Claroscuro), nada más. Los shows españoles los hicimos casi sin ensayo, porque estábamos constantemente componiendo temas nuevos, ya que el material viejo nos tenía saturados. Grabábamos los ensayos con un par de micrófonos en estereo y un Dat. Por aquel entonces, la formación se completaba con Tweety Gonzalez y Daniel Melero.

Z. Bosio: A la hora de grabar, tratamos de rescatar esa cosa instantánea de las primeras tomas, no porque crea que la primera sea la mejor, sino porque zapábamos canciones. Este disco es el más Soda Stereo porque fue hecho por los tres, improvisando y armando los temas, durante 3 meses. Los temas no estaban estructurados; las introducciones eran, quizás, más larga de lo aconsejable, pero nosotros disfrutábamos tocarlas de ese modo. Se hicieron 20 canciones de las cuales quedaron 12. Tratamos de llevar las cosas hasta el limite de lo soportable, por eso hay mucho de repetición o “droga musical”, como dice Gustavo.

M.: Entre todos los temas del álbum, cuales son los preferidos dd la banda y por que fue Primavera 0 el elegido para la difusión?

G,C: La elección de Primavera 0 fue manejada por nosotros y fue el primer tema con que comenzamos a trabajar para este disco. Lo que uno intenta, generalmente, es elegir uno que muestre algo de lo que pasa en todo el disco. En Canción Animal era obvio que “Música Ligera” era el hit, pero nosotros salimos con “Séptimo Día”, porque nos pareció el mas representativo del álbum y que Música Ligera se iba a imponer solo. Acá arrancamos con “Primavera 0” y quizás la gente luego se pegue con algún otro tema.

Z.B: Creo que el favorito del grupo es sin duda “En Remolinos", porque nos sorprende. El ritmo de la bata muestra cosas de Soul 11 Soul, las guitarras son al estilo de My Blody Valantine, pero a pesar de su punto de partida, degenera en otra cosa y eso es lo que más nos asombra. Es una canción de amor que navega entre la calma y el huracán. Es la posibilidad de soñar con un paraíso en medio de la tormenta y eso es una locura a la que no habíamos accedido nunca compositivamente hablando.

M: Por qué se decidieron por el nombre de “Dynamo” para el titulo del álbum?

G.C.: Dynamo es una palabra que nos retrotrae a nuestra niñez y cuando apareció, creímos que era una palabra elegante para definir este diseño que hicimos como disco. Además de agradarnos estéticamente, transmite esa cosa de energía mecánica que sucede cuando uno pulsa un instrumento. Por todas estas razones y quizás por ninguna de ellas. En realidad nos gusta como suena.

M.: En este disco se nota una sobredosis de sonidos. ¿Fue esto hecho a propósito?

G.C.: Si, en general hay muy pocas sobre grabaciones pero utilizamos mucho esa cosa de textura sonora indefinida. La voz contrasta con la violencia de los sonidos con una suavidad, en la cual me sentí muy cómodo cantando. Me aburrí de exasperarme y de gritar. En “Dynamo”, la heroicidad se sugiere de otra manera. En álbumes anteriores lo vocal era más central pero aquí debe ser parte de un todo. El disco está hecho con instantaneidad pero tiene una elaboración que hace que el oyente deba escucharlo varias veces para ir descubriendo las sutilezas inmersas en los temas.

M. ¿Cuál fue el trabajo de Daniel Melero?

C.A.: En “Canción Animal” trabajó junto con Gustavo en la parte de letras, pero esta vez tuvo más que ver en lo musical. Se samplearon cosas de Gustavo zapando o haciendo acoples con la viola y esto lo trabaja Daniel. Además hay cosas de otros discos en un estado irreconocible. El riff inicial de “Ameba” es un sampler de un tema de Iggy Pop mezclado con el sonido distorsionado de la guitarra. Melero tuvo mucho que ver en la gestación del material y es siempre el elemento de consulta conceptual.

M. ¿Soda Stereo siempre tuvo muy en cuenta el factor estético durante toda su carrera, tanto en los videos como en las tapas de los discos. ¿Por qué?

G.C.: Tiene que ver con nosotros y con la gente que nos rodea. A un estímulo sonoro se le corresponde uno visual. Por alguna razón hicimos antes un video que un disco y esto es porque la imagen visual estaba presente en nuestra música desde el momento en que la concebimos. Necesitamos gente alrededor nuestro que plasme la idea estética que tenemos.

Z.B.: Las tapas siempre fueron un mensaje que también queríamos tirar ya que la gente, mientras escucha el disco (o CD), bucea dentro de la tapa y se va haciendo imágenes, por lo tanto, nunca quisimos dejar el arte librado al azar.

M.: ¿Cómo surgió la idea de montar un estudio de grabación?

G.C: Desde hace 3 años que veníamos barajando la posibilidad de hacerlo y cuando estuvimos en Venezuela, en la playa con Zeta, tomamos la decisión definitiva de armar nuestro propio submarino. La idea original era hacer un estudio digital pero luego de varias consultas nos decidimos por lo analógico. La consola tiene un sistema de automatización hecho por “Híper” Adrián Rodríguez, quien se encarga del mantenimiento del estudio, el cual fue diseñado con la ayuda de Carlos Piriz. Por ahora, queremos trabajarlo con proyectos que nos involucren, como Los 7 delfines, Aguirre o La Guardia del Fuego.

Z.B: Las maquinas llegaron cuando estábamos haciendo los conciertos del Gran Rex y con la ansiedad de probarlas, pusimos todo en un camión y grabamos los shows que resultaron en "Rex Mix”. El lugar no pretende ser un estudio acústico minucioso sino un lugar con mucho ambiente. Está lleno de errores par uno se aprovecha de ellos los convierte en virtudes.

M.:¿Cual es el equipamiento de Supersónico?

G.C: La consola es una Souncraft 2400, con la que habíamos trabajado en Moebio, la maquina es una Sony TR Z4 y cuenta con un ajuste de bias por canal que luego, con solo tocar un botón, vuelve a su estado normal. Cuando viajamos a Londres compramos unos pre Neve, como para tener mejor señal de entrada y poder ir directamente a la maquina sin pasar por la consola. Los monitores son Meyer HD1 y hay procesadores viejos y nuevos como el TC Electronics o el delay MXR, un Eventide usado por Invisible, un Ultra Harmonizer o una vieja Roland a cinta.

M.: ¿Por qué eligieron hacer la masterización en el exterior?

G.C: La masterización berreta es levantar un poco los aguditos para que todo suene mas brillante y punto, en cambio el tipo de trabajo que se hace afuera es muy diferente. Arnie Acosta, quien trabajó con nosotros, hace siempre la masterización para U2 y el tipo es como un referente obligado para el grupo. En realidad se trata de una post-ecualización para que todo suene dentro de los cánones aceptables a tus oídos.

Z.B.: Es un trabajo totalmente subjetivo, todo está librado a la oreja del técnico y por eso recurrimos a el, ya que habíamos escuchado sus masterizados anteriores.

G.C.: En realidad, se trata de conseguir una mejor separación de los estéreos y que las frecuencias se manifiesten con mayor intensidad, además de emparejar los niveles de los diferentes temas. Es una maximización del sonido final.

De esta forma, el “Dynamo” puede sonar entre la calma y el huracán.

Entrevista a cargo de Marcelo Roascio.